Mantener tu campana extractora limpia es esencial para garantizar que funcione correctamente y absorba de manera eficiente los olores y el humo de la cocina. A veces, puede parecer una tarea complicada, pero con los pasos adecuados y un poco de dedicación, lograrás que tu campana luzca impecable y siga trabajando como nueva.
A continuación, te explicamos paso a paso cómo limpiarla por dentro y qué debes tener en cuenta para que esté siempre en las mejores condiciones.
¿Por qué es importante limpiar tu campana extractora?
Con el tiempo, la grasa, el humo y los olores que absorbe la campana extractora de humo van acumulándose en los filtros y conductos, lo que puede afectar su rendimiento y hasta generar malos olores en tu cocina.
Una campana sucia puede volverse un riesgo de incendio. Mantenerla limpia no solo garantiza su buen funcionamiento, sino que también contribuye a una cocina más saludable y segura.



Materiales necesarios para limpiar campanas extractoras
Antes de comenzar, para limpiar campanas extractoras asegúrate de tener todo lo necesario a la mano para hacer el trabajo más rápido y eficiente:
- Guantes de limpieza
- Jabón desengrasante o detergente suave
- Esponja o paño suave
- Cepillo de cerdas suaves
- Agua caliente
- Vinagre o bicarbonato de sodio
- Un recipiente o bandeja para remojar los filtros
Cómo limpiar los filtros de la campana extractora
Los filtros son una parte fundamental de la campana extractora en cocina, ya que son los encargados de atrapar la grasa y evitar que el humo y los olores se propaguen por toda la casa. Para limpiarlos correctamente, sigue estos pasos:
1. Desmonta los filtros
La mayoría de las campanas de cocina modernas cuentan con filtros extraíbles. Consulta el manual de tu campana para saber cómo desmontarlos de forma segura. Generalmente, se trata de filtros de malla o filtros de carbón.
2. Limpia los filtros
Si tus filtros son de malla metálica, sumérgelos en un recipiente con agua caliente y un poco de jabón desengrasante. Deja que se remojen por unos 10 a 15 minutos. Luego, frota con un cepillo suave para eliminar cualquier residuo de grasa.
Si los filtros son de carbón, revisa si son lavables. De lo contrario, será necesario reemplazarlos de vez en cuando para mantener el buen funcionamiento de la campana extractora de olores.
3. Enjuaga y seca
Una vez que hayas limpiado los filtros, enjuágalos bien con agua caliente para eliminar cualquier rastro de jabón. Asegúrate de secarlos completamente antes de volver a instalarlos en la campana.
Limpieza del interior de la campana extractora
Además de los filtros, es fundamental limpiar el interior de la campana extractora de humo para que siga eliminando eficazmente los olores y el vapor de la cocina. Sigue estos pasos:
1. Desenchufa la campana extractora
Antes de empezar a limpiar el interior, es importante que desconectes la campana de la corriente eléctrica para evitar accidentes.
2. Limpia el interior
Usa una esponja o un paño suave con agua caliente y jabón desengrasante para limpiar las paredes internas de la campana. Presta especial atención a las zonas donde se acumula más grasa, como los bordes y los conductos de ventilación. Si encuentras grasa muy incrustada, puedes usar una mezcla de vinagre con bicarbonato de sodio para ayudar a deshacerte de los restos más difíciles.
3. No olvides las rejillas de ventilación
Las rejillas también acumulan bastante grasa. Utiliza un cepillo de cerdas suaves para limpiarlas, y si es necesario, remójalas como hiciste con los filtros.
4. Secado
Una vez hayas terminado de limpiar todo el interior, seca bien las superficies con un paño seco. Esto evitará la aparición de manchas de agua y garantizará que no queden restos de humedad en el aparato.
Cómo mantener la campana extractora limpia por más tiempo
Para que tu campana extractora en cocina se mantenga en buen estado, es recomendable seguir algunos consejos que te ayudarán a evitar que la grasa y los malos olores se acumulen rápidamente:
- Limpia los filtros regularmente: Lo ideal es limpiar los filtros al menos una vez al mes, o más seguido si cocinas con frecuencia o usas mucha grasa en tus preparaciones.
- Usa productos desengrasantes: Esto ayudará a que la grasa no se acumule tanto en las superficies de la campana y sea más fácil de limpiar.
- Verifica el estado de los filtros de carbón: Si tu campana usa filtros de carbón, cámbialos cada seis meses o según lo recomiende el fabricante.
- Limpia después de cocinar: Si notas salpicaduras o acumulación de grasa en la parte externa, límpialas de inmediato para evitar que se acumulen y se vuelvan difíciles de quitar.
Limpiar una campana extractora no tiene por qué ser una tarea complicada si sigues estos pasos y lo haces de forma regular. Mantener este electrodoméstico en óptimas condiciones no solo mejorará el ambiente de tu cocina, sino que también prolongará su vida útil. Recuerda siempre consultar el manual de tu campana para cualquier indicación específica del fabricante y asegurarse de realizar la limpieza de manera segura. Además, puedes aprovechar el mantenimiento preventivo que ofrece Servicio Mabe para garantizar que tu campana y demás electrodomésticos funcionen siempre de la mejor manera.