Si has notado que tu ropa no huele tan fresca como antes, o que tu lavadora tiene un olor raro aunque esté vacía, no estás solo. Es más común de lo que parece, y la solución está al alcance de tus manos. Aprender cómo limpiar la lavadora de forma adecuada puede hacer la diferencia entre un lavado normal y uno verdaderamente eficiente. Además, ayuda a prolongar la vida útil del electrodoméstico y evitar visitas innecesarias al técnico.
Ya sea que tengas una lavadora automática, una lavadora secadora o un modelo más tradicional, todos estos aparatos necesitan cuidados periódicos para funcionar al 100%. ¡Aquí te dejamos una guía práctica, con trucos y pasos sencillos que puedes aplicar desde hoy mismo!
¿Por qué mi lavadora huele mal?
El mal olor en las lavadoras suele deberse a la acumulación de residuos de detergente, suavizante, pelusa y humedad en partes internas como el tambor, los filtros o la goma de la puerta. Con el tiempo, esto puede generar moho y bacterias, sobre todo en climas húmedos como el de Costa Rica.
Este problema se da tanto en lavadoras automáticas como en las lavadora secadora, y afecta directamente el olor de tu ropa. Lo mejor es incluir el mantenimiento de la lavadora como una rutina, igual que cuando limpias la cocina o el baño.
Cómo limpiar la lavadora paso a paso
1. Limpieza del tambor
- Lavado con vinagre y bicarbonato: Verté 2 tazas de vinagre blanco y ¼ de taza de bicarbonato directamente en el tambor. Ejecuta un ciclo de lavado largo con agua caliente (sin ropa). Esto ayuda a eliminar residuos, olores y bacterias.
- Opcional: Si tu modelo permite ciclos de autolimpieza, utilizalo con los productos recomendados por el fabricante.



2. Limpieza del filtro
El filtro atrapapelusas, monedas, botones y otros restos que pueden quedar tras cada lavado. Revisalo al menos una vez al mes:
- Localiza el filtro (usualmente está en la parte inferior frontal).
- Colocá una toalla debajo y abrí con cuidado.
- Saca el filtro y limpia con agua tibia y un cepillo.
- Volvé a colocar bien para evitar fugas.
3. Limpieza del cajón de detergente
Este cajoncito suele llenarse de residuos de jabón o suavizante:
- Sacalo completamente (la mayoría se puede retirar con un leve empujón).
- Lavalo con agua caliente y un cepillo de dientes viejo.
- Secalo bien antes de volver a ponerlo.
4. Revisión de la goma de la puerta (en modelos frontales)
La goma atrapa humedad y residuos. Para limpiarla:
- Usa un paño con vinagre o agua con jabón.
- Asegúrate de secar muy bien, especialmente en los pliegues.
- Revisá si hay señales de moho o mal olor. Si es muy persistente, podrías necesitar ayuda de un técnico de lavadora.
Consejos para evitar malos olores a futuro
Después de limpiar la lavadora, lo ideal es mantenerla en buen estado con estos consejos:
- Dejá la puerta abierta después de cada lavado, así evitarás la acumulación de humedad.
- Usá la cantidad correcta de detergente, especialmente si usás detergentes líquidos o concentrados.
- No sobrecargues la lavadora, esto impide que el agua circule bien y se limpien los residuos.
- Hacé un lavado de limpieza una vez al mes, especialmente si usás la lavadora con frecuencia.
- Si tenés una lavadora automática o una lavadora secadora, revisá el manual para seguir las recomendaciones específicas del fabricante.
¿Cuándo llamar a un técnico?
Si a pesar de todo, el mal olor persiste, si notás que tu ropa sigue saliendo con residuos o si hay fugas de agua, es hora de buscar un técnico de lavadora certificado. A veces, el problema puede estar en el sistema de desagüe o en piezas internas que requieren revisión profesional. En Mabe, recomendamos siempre hacer un mantenimiento de lavadora al menos una vez al año con personal calificado.
Cómo limpiar la lavadora: un hábito que vale oro
Ahora que ya sabés cómo limpiar la lavadora, puedes evitar esos malos olores tan molestos y cuidar tu ropa como se merece. No importa si usas una lavadora automática, una lavadora secadora, o cualquier otro modelo: dedicar unos minutos al mes a la limpieza puede ahorrarte tiempo, dinero y más de un dolor de cabeza.
Recuerda que en Mabe estamos para ayudarte a cuidar de tus electrodomésticos y que sigan funcionando como el primer día. ¡Tu lavadora te lo va a agradecer!